News Herald – Juliann Talkington

Juliann

Durante el transcurso del siglo 20, con la transición de la era industrial a la era digital. Como parte de la transición, las computadoras se movieron desde el concepto hasta el laboratorio de ciencias o a la habitación familiar como accesorio de vestir. La adopción de estas máquinas en la sociedad estadounidense ha cambiado la forma de comunicarse, aprender e interactuar.

 

Como los datos se escurren, en cómo estas máquinas han impactado a la sociedad, algunas personas están empezando a cuestionar si una transición completa a un mundo digital, es de sabios.

 

A partir de finales de 1970, las escuelas fueron puestas bajo la tecnología con una presión cada vez mayor. En respuesta a la presión, las escuelas comenzaron a enseñar clases de tecnología. Para adaptarse a estas nuevas escuelas, cortaron programas que parecían fuera de fecha. Uno de los programas en el tajo era (y es) la escritura a mano.

 

Por supuesto, es el método más lento de la comunicación. Sin embargo, uno tiene que preguntarse si es una buena idea eliminar esta herramienta de comunicación y expresión artística de nuestro sistema educativo.

 

La escritura es una de las habilidades más complejas que han desarrollado los seres humanos. Se trata de las dos funciones motoras finas y gruesas que estimulan más de 3.000 terminaciones nerviosas en cada dedo que se conectan directamente al cerebro.

 

Según los investigadores, que están utilizando herramientas como la resonancia magnética para mapear el cerebro, la escritura a mano es más que una forma de comunicarse. La práctica ayuda a los estudiantes a aprender las letras y formas, pueden mejorar la generación y expresión de ideas, y pueden ayudar bien con el desarrollo motor-habilidad.

 

El subdirector de la Escuela Primaria James Irwin, Cindee Will, redacto una Carta de Colorado Springs, donde cree que la escritura cursiva da a los niños las herramientas mentales que necesitan para leer. Los trazos de letras roscadas ayudan a guiar a los ojos de los estudiantes de izquierda a derecha y ayuda a correlacionar la lectura y la escritura.

 

En la Escuela Renascence, nos encontramos con que el dominio de las matemáticas está estrechamente vinculado a las habilidades de la escritura a mano. Como regla general, los niños menos calificados son de escritura más que de matemáticas.

 

Con todos estos datos, parece que el péndulo puede haber oscilado hasta ahora hacia la mecanización que estamos perdiendo en nuestra capacidad de pensar. Con ciclos más cortos en la tecnología, a lo mejor tenemos que reevaluar lo que enseñamos en las escuelas. En vez de más tiempo con productos informáticos que ya son obsoletos para el momento en que lleguen al mercado de enfoque, tiene más sentido hacer hincapié en actividades que enseñen a los estudiantes cómo pensar, soñar, cálculo y realización.

 

Juliann Talkington, fundadora de la Escuela Internacional Renaissance, (www.rschoolgroup.org). Para más información, puede ponerse en contacto a través de jtalkington@rschoolgroup.org o al 850-873-6981.